Su arquitectura es definida como “de austeridad suntuosa” y “con características
que coexisten armoniosamente con la naturaleza. Diseñado a escala humana,
este resort privilegia dos elementos por encima de todo: el horizonte y el océano”.
Este maravilloso lugar ganó el Premio Prix Versailles 2017, que lo ubica como el
mejor hotel del mundo por su arquitectura e interiorismo.