Lingotto una joya de la arquitectura industrial

El Lingotto, es sin duda, uno de los testimonios más emblemáticos de la arquitectura industrial del siglo XX. Esta monumental fábrica de automóviles, encargada por FIAT al visionario arquitecto Giacomo Mattè Trucco, inició su construcción en 1916 y abrió sus puertas siete años después.

La transformación del Lingotto

Lo que hace revolucionario este diseño es su enfoque en la eficiencia productiva. La concepción del edificio como una gran cinta de producción permitía que las piezas ingresaran por la planta baja y se ensamblaran en un recorrido ascendente en espiral a través de sus cinco plantas, culminando en la azotea con una pista de pruebas donde se verificaba el funcionamiento de los automóviles.

Este coloso de 355,160 metros cuadrados de acero y hormigón fue, en su tiempo, la fábrica de automóviles más grande del mundo, produciendo más de 80 modelos distintos.

La estructura se destaca por su impresionante pista de pruebas de 2.4 kilómetros de largo, situada a 21.3 metros sobre el suelo, con peraltes pronunciados en sus extremos.

La pista de pruebas, un símbolo de innovación

Esta pista no solo es un hito arquitectónico, sino que también representa una innovación funcional que sigue asombrando hoy en día. El Lingotto operó como fábrica hasta 1982.

Renzo Piano y la reinvención de un ícono

Fue entonces cuando el arquitecto Renzo Piano ganó un concurso para su transformación, proponiendo un espacio público multifuncional. Entre 1985 y 1989, el edificio se convirtió en un complejo con salas de conciertos, cines, tiendas, un centro de exposiciones y un hotel, revitalizando su propósito y adaptándose a las nuevas necesidades.

La renovación del Lingotto incluyó añadidos como un helipuerto y espacios para conferencias. Bajo el circuito de pruebas se abrió un centro comercial, galerías de arte, entre otros servicios.

Un espacio multifuncional para todos

Actualmente, la azotea, accesible a través de Casa 500, una exposición que narra parte de la historia de FIAT y el Fiat 500, se ha convertido en un jardín que ha transformado la pista de pruebas.

©Archivo

La fábrica de automóviles que cambió el mundo

El Lingotto desafía las concepciones tradicionales de una fábrica, transformándose en un diseño innovador y funcional que ha evolucionado con el tiempo para convertirse en un espacio único y multifacético, testimonio de la capacidad de la arquitectura para adaptarse y reinventarse.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR:

SUWARI KNEELING CHAIR