La casa de verano se encuentra en el pueblo tradicional de Oia, en la isla de Santorini. Consiste en una casa-cueva. Ahí, una escalera exterior retorcida conecta la parte superior con ambos niveles que terminan en el patio con la piscina que proporciona una agradable vista infinita. Por dentro hay una sala de estar con una pequeña cocina, dos dormitorios con baño y sauna. El patio exterior de la casa-cueva ha sido diseñado como una piscina infinita, un espacio abovedado semi abierto a un lado (utilizado para instalaciones exteriores de comedor y salón) así como pequeños rincones para sentarse, conforman esta plataforma.

  © Vangelis Paterakis

La idea principal de la propuesta es la explotación de las curvas amorfas de la casa-cueva existente en un espacio habitable escultórico y el diseño de una plataforma exterior con una piscina colgante en los acantilados volcánicos. Sombra y luz; sensación de inmersión y vacío, son las sensaciones que se transmiten en este espacio. Su diseño está totalmente integrado en el paisaje volcánico y la arquitectura cubista de Santorini sólo que con toque contemporáneo.

Para su construcción se utilizó “gunita”, una mezcla de cemento, arena y agua aplicada a través de una manguera de presión, produciendo una densa capa dura de hormigón. Las piedras volcánicas y el yeso blanco se utilizan para la construcción de las paredes interiores y exteriores. Mármol beige y yeso de cemento para los pisos.

El yeso de cemento utilizado en el interior de la casa cueva es una técnica tradicional que resalta la plasticidad del espacio.

Kapsimalis Architects Área: 100 m² Año: 2017.