SILLÓN BERGÉRE
1 febrero, 2024 / Dirección editorial Arkin
Es uno de los sillones más famosos de la historia. Es imponente, fascinante, pero sobre todo cómodo. Y nunca pasa de moda.
La Bergère es el sillón que se ha convertido en un icono de diseño: es un asiento acogedor y relajante, perfectamente adaptable a los más variados contextos y estilos de decoración, por lo que no pasa de moda.
Con asiento, respaldo y reposabrazos tapizados, el sillón individual Bergère se introdujo en el siglo XVII, durante el reinado de Luis XIV, cuando el mobiliario se hizo menos formal y más cómodo. Los reposabrazos de la silla están situados más atrás en el asiento ancho y profundo para adaptarse a la voluminosa moda de la época. La Bergère es similar a la Fauteuil, ya que ambas son tipos de sillas tapizadas con armazón de madera vista. Ambas son estupendas sillas de acento.
Este sillón con «orejas» se ha reinterpretado y adaptado a los gustos de las distintas épocas, sin perder nunca sus características únicas y esenciales. Equipado con gran clase y refinamiento, el sillón Bergère puede ser el protagonista tanto en ambientes clásicos como en espacios más tendientes a un estilo moderno o contemporáneo.
Hoy en día, la forma del Bergère puede ser tan delgada y esbelta como para volverse minimalista. Los materiales alternan entre lacados y acabados metálicos satinados y la sinuosidad a veces puede resultar más seca, por así decirlo. El asiento, en cambio, sigue siendo muy ancho y el respaldo, siempre bastante alto, termina con las famosas «orejas» laterales que pueden acentuarse más o menos. En cuanto a los colores, la paleta de colores es muy amplia: va del negro al gris, al blanco, del amarillo al verde, al azul y al rojo.
La Bergère es una cómoda silla de lectura, la más tradicional de las sillas de lectura. Es ideal para momentos de relax solo o en compañía, perfecto como asiento para charlar con amigos y familiares, para ver la televisión, para leer un libro, para escuchar buena música, para tomar una copa.